La escuela rusa llega a la Quincena Musical de San Sebastián de la mano de una de las orquestas más reputadas en este repertorio, la Filarmónica de San Petesburgo, que bajo la batuta de su titular desde 1988, Yuri Tmirkanov, ofrecerá obras como "Ivan el Terrible" acompañado del Orfeón Donostiarra.
Sábado 25 de agosto de 2012 | EFE
La primera cita de la formación rusa, que ya estuvo en la Quincena en el año 1993, con el escenario del Kursaal será el próximo lunes, 27 de agosto, con la monumental "Iván el terrible", de Sergei Prokofiev.
Se trata de una composición para orquesta, narrador, mezzosoprano y barítono derivada de la banda sonora que creó este compositor para la película homónima de Sergei Einstein.
El filme narra la tempestuosa vida de Iván el Terrible, que fue zar de Rusia entre 1547 y 1584, y cuya primera parte se estrenó en 1942 y la segunda en 1945, pero ésta no fue del agrado de Stalin y no volvió a las pantallas de la extinta Unión Soviética hasta 1958, cinco años después de la muerte del dictador.
La parte vocal de la obra correrá a cargo del Orfeón Donostiarra, que la ha interpretado en numerosas ocasiones, y los solistas Nikolai Burov (narrador), Ketevan Kemoklidze (mezzosoprano) y Dimutry Lavrov (barítono).
El martes la Filarmónica de Petesburgo, la orquesta más antigua de Rusia que ha actuado con solistas como Horowitz o Prokofiev tocando sus propios conciertos de piano y que el maestro Eugeny Mravinski -que la dirigió entre 1938 y 1988- la convirtió en una de las mejores del mundo, arrancará su actuación con la obertura de "La Gran Pascua Rusa", de Rimsky-Korsakov.
El programa incluye también el "Concierto para violín", del alemán Max Bruch, que interpretará la joven solista japonesa Sayaka Shoji, una de las solistas con mayor proyección mundial.
El concierto concluirá con "La Sinfonía nº 6" de Tchaikovsky, conocida como la "Patética", considerada uno de los emblemas de la música rusa, que el compositor escribió en 1893 y estrenó nueve días antes de su muerte.
La partitura es de un hondo dramatismo que se atribuye al sentimiento de despedida de la vida que quiso expresar el autor ruso.
Se trata de una composición para orquesta, narrador, mezzosoprano y barítono derivada de la banda sonora que creó este compositor para la película homónima de Sergei Einstein.
El filme narra la tempestuosa vida de Iván el Terrible, que fue zar de Rusia entre 1547 y 1584, y cuya primera parte se estrenó en 1942 y la segunda en 1945, pero ésta no fue del agrado de Stalin y no volvió a las pantallas de la extinta Unión Soviética hasta 1958, cinco años después de la muerte del dictador.
La parte vocal de la obra correrá a cargo del Orfeón Donostiarra, que la ha interpretado en numerosas ocasiones, y los solistas Nikolai Burov (narrador), Ketevan Kemoklidze (mezzosoprano) y Dimutry Lavrov (barítono).
El martes la Filarmónica de Petesburgo, la orquesta más antigua de Rusia que ha actuado con solistas como Horowitz o Prokofiev tocando sus propios conciertos de piano y que el maestro Eugeny Mravinski -que la dirigió entre 1938 y 1988- la convirtió en una de las mejores del mundo, arrancará su actuación con la obertura de "La Gran Pascua Rusa", de Rimsky-Korsakov.
El programa incluye también el "Concierto para violín", del alemán Max Bruch, que interpretará la joven solista japonesa Sayaka Shoji, una de las solistas con mayor proyección mundial.
El concierto concluirá con "La Sinfonía nº 6" de Tchaikovsky, conocida como la "Patética", considerada uno de los emblemas de la música rusa, que el compositor escribió en 1893 y estrenó nueve días antes de su muerte.
La partitura es de un hondo dramatismo que se atribuye al sentimiento de despedida de la vida que quiso expresar el autor ruso.
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