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Martes 24 de abril de 2012
RADIO SAN SEBASTIÁN
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Aunque no se ha comunicado formalmente, el Convenio de Residuos que la Diputación Foral de Bizkaia firmó con la de Gipuzkoa, por la que desde 2008 recibe 25.000 toneladas de basuras al año, no se prorrogará.
La Diputación de Bizkaia considera que Gipuzkoa no ha cumplido su parte del Convenio y que no puede ofrecer causas justificadas por no hacerlo, tal y como se recoge en el acuerdo de prórroga en el que se encontraba la construcción de un centro de tratamiento de residuos que, hoy por hoy, ni se plantea.
Juan María Aburto, portavoz de la Diputación de Bizkaia, lo explica con un claro ejemplo: “Esto es como si a un amigo o a una amiga le dejamos nuestro piso porque está haciendo obras en el suyo […] y pasados unos meses comprobamos que ha paralizado las obras […] y sigue viviendo en el nuestro. Yo creo que seguramente entenderíamos que no se producen las condiciones para seguirle dejando nuestro piso”.
Para el Diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa, Juan Carlos Alduntzin, el no de Bizkaia no es ningún obstáculo para la política que defiende la entidad foral de Residuo Cero. Esta decisión, dice, “no le pilla de sorpresa” y añade que “no existen razones objetivas para que se rompa el pacto” y asegura que la Diputación guipuzcoana “sí ha cumplido todos los términos del Convenio”.
La decisión ha vuelto a enfrentar a PSE y PNV. Por un lado, el partido socialista exige al PNV que retire el apoyo dado a Bildu en la moratoria de 6 meses o, de lo contrario, según el socialista Denis Itxaso “tendrá consecuencias suicidas para Gipuzkoa”. Desde el PNV, María Eugenia Arrizabalaga acusa a los socialistas de haber retrasado la solución al problema. Por su parte, el PP alerta del riesgo de judicializar este asunto y que tengan que ser los tribunales los que decidan si no se llega a un consenso político.
El Convenio vence el 12 de junio por lo que, a partir de esa fecha, Gipuzkoa deberá decidir dónde deposita y cómo trata sus basuras.
La Diputación de Bizkaia considera que Gipuzkoa no ha cumplido su parte del Convenio y que no puede ofrecer causas justificadas por no hacerlo, tal y como se recoge en el acuerdo de prórroga en el que se encontraba la construcción de un centro de tratamiento de residuos que, hoy por hoy, ni se plantea.
Juan María Aburto, portavoz de la Diputación de Bizkaia, lo explica con un claro ejemplo: “Esto es como si a un amigo o a una amiga le dejamos nuestro piso porque está haciendo obras en el suyo […] y pasados unos meses comprobamos que ha paralizado las obras […] y sigue viviendo en el nuestro. Yo creo que seguramente entenderíamos que no se producen las condiciones para seguirle dejando nuestro piso”.
Para el Diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa, Juan Carlos Alduntzin, el no de Bizkaia no es ningún obstáculo para la política que defiende la entidad foral de Residuo Cero. Esta decisión, dice, “no le pilla de sorpresa” y añade que “no existen razones objetivas para que se rompa el pacto” y asegura que la Diputación guipuzcoana “sí ha cumplido todos los términos del Convenio”.
La decisión ha vuelto a enfrentar a PSE y PNV. Por un lado, el partido socialista exige al PNV que retire el apoyo dado a Bildu en la moratoria de 6 meses o, de lo contrario, según el socialista Denis Itxaso “tendrá consecuencias suicidas para Gipuzkoa”. Desde el PNV, María Eugenia Arrizabalaga acusa a los socialistas de haber retrasado la solución al problema. Por su parte, el PP alerta del riesgo de judicializar este asunto y que tengan que ser los tribunales los que decidan si no se llega a un consenso político.
El Convenio vence el 12 de junio por lo que, a partir de esa fecha, Gipuzkoa deberá decidir dónde deposita y cómo trata sus basuras.
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