El consistorio donostiarra tendrá que pagar 20.000 euros debido a un uso indebido de las cámaras en los autobuses urbanos
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Viernes 17 de enero de 2014 | EVA MONENTE
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Una cámaras que, sin embargo, además de controlar los carriles bus o las matrículas de los coches aparcados en dichos carriles, fueron utilizadas para otras incidencias para las que no estaban autorizadas en temas de seguridad vial o de accidentabilidad.
El pasado mes de mayo llegó la denuncia a la Agencia Vasca de Protección de Datos y de inmediato el alcalde, Juan Karlos Izagirre, ordenó la suspensión. Hubo varias alegaciones por parte del Ayuntamiento y de Dbus, pero Radio San Sebastián puede adelantarles la decisión final: sancionar al consistorio donostiarra por vulnerar intereses privados de la ciudadanía.
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