Las mediciones se realizaron los días 4, 5 y 6 de junio. Se han identificado 146 antenas de telefonía móvil en la ciudad
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Miércoles 11 de diciembre de 2013
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El Ayuntamiento de Donostia/San Sebastián ha creado un grupo de trabajo con el fin de elaborar una nueva ordenanza reguladora de las instalaciones radioeléctricas pertenecientes a las redes de telecomunicaciones. El grupo estará conformado por representantes de todos los grupos políticos y tendrá como objeto actualizar la ordenanza vigente que se ha quedado obsoleta. La ordenanza data del año 1999 y se elaboró en base a la Ley 11/1998 General de Telecomunicaciones del Estado. Dicha ley permite emisiones de 450 microvatios por centímetro cuadrado, cuando las recomendaciones europeas abogan por que los niveles no superen los 0,1 microvatios por centímetro cuadrado.
Axier Jaka, concejal de Medio Ambiente, ha remarcado la importancia de ir de la mano en este ámbito ya que las emisiones de antenas de telefonía móvil es un tema de creciente preocupación social, y en ese sentido, ha recordado que el pasado mes de febrero todos los grupos municipales aprobaron por unanimidad una declaración institucional para adherirse a la resolución 1815 de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa: “Dicha resolución establece que hay que aplicar el principio de precaución, principio conocido como ALARA (As Low As Rasonably Achievable, Tan Bajo Como Sea Razonablemente Alcanzable), y eso es lo que pretendemos con la redacción de una nueva ordenanza, establecer criterios de precaución”.
Axier Jaka, concejal de Medio Ambiente, ha remarcado la importancia de ir de la mano en este ámbito ya que las emisiones de antenas de telefonía móvil es un tema de creciente preocupación social, y en ese sentido, ha recordado que el pasado mes de febrero todos los grupos municipales aprobaron por unanimidad una declaración institucional para adherirse a la resolución 1815 de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa: “Dicha resolución establece que hay que aplicar el principio de precaución, principio conocido como ALARA (As Low As Rasonably Achievable, Tan Bajo Como Sea Razonablemente Alcanzable), y eso es lo que pretendemos con la redacción de una nueva ordenanza, establecer criterios de precaución”.
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Jaka ha señalado que en coherencia con el trabajo desarrollado hasta ahora esta tarde se presentará públicamente el estudio sobre el mapa radioeléctrico de la ciudad, un documento que ha puesto en evidencia que los niveles de emisiones electromágneticas se encuentran dentro de la normativa legal estatal vigente, a pesar de que superan en muchos puntos lo recomendado por el Consejo de Europa: “Se trata del primerestudio que se realiza en este ámbito, y será el punto de partida para realizar una nueva ordenanza que actualice la normativa y se respeten los criterios de prevención en materia de salud pública”.
Las mediciones se realizaron los días 4, 5 y 6 de junio en su gran mayoría en lugares públicos. En total se han identificado 146 antenas de telefonía móvil en la ciudad, y el estudio ha evidenciado que los niveles medidos están dentro de la normativa estatal vigente, a pesar de que muchas superan las recomendaciones europeas más avanzadas, en algunos casos ampliamente. Entre los valores medidos se han recogido densidades de potencia desde 0,01 hasta más de 2 microwatios.
Raúl de la Rosa, experto en prevención laboral y encargado de elaborar el estudio, ha anunciado que efectivamente la mayor concentración de antenas se da en el centro de la ciudad y en el barrio de Gros: “Hemos puesto especial atención en las zonas considerados sensibles, como centros educativos, guarderías, hospitales o residencias y en entornos urbanos como parques o zonas de recreo, debido a la presencia de población con mayor sensibilidad a las radiaciones como son los niños. Las mediciones se han realizado mayormente a nivel de suelo, a pesar de que también se han realizado mediciones en las zonas más cercanas a las antenas donde las emisiones son de mayor magnitud, y más si no se encuentran obstáculos situados entre la antena y el punto medido”. Raul de la Rosa ha recordado que se considera que la tasa de personas electrohipersensibles en los países industrializados se acerca al cinco por ciento de la población.
Axier Jaka ha señalado que a pesar de que los datos revelados en este estudio dan una fotografía muy significativa, y lo importante ahora es seguir trabajando para que en la mayor brevedad posible se redacte una nueva ordenanza: “Este Ayuntamiento quiere dar pasos firmes para controlar que los campos electromagnéticos de alta frecuencia que se generan en el municipio no supongan una afección en la salud de las personas, y, entre otras cosas, también vamos a proceder a regularizar las antenas que hoy en día carecen de licencia municipal”.
El estudio, en ese sentido, se ha elaborado tomando como punto de partida la base de datos de las licencias que conceden el Ayuntamiento y el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Así se ha detectado que hay antenas que carecen de licencia municipal, por lo que ahora se contrastaran los datos para identificar dichas antenas y proceder a su regulación
Las mediciones se realizaron los días 4, 5 y 6 de junio en su gran mayoría en lugares públicos. En total se han identificado 146 antenas de telefonía móvil en la ciudad, y el estudio ha evidenciado que los niveles medidos están dentro de la normativa estatal vigente, a pesar de que muchas superan las recomendaciones europeas más avanzadas, en algunos casos ampliamente. Entre los valores medidos se han recogido densidades de potencia desde 0,01 hasta más de 2 microwatios.
Raúl de la Rosa, experto en prevención laboral y encargado de elaborar el estudio, ha anunciado que efectivamente la mayor concentración de antenas se da en el centro de la ciudad y en el barrio de Gros: “Hemos puesto especial atención en las zonas considerados sensibles, como centros educativos, guarderías, hospitales o residencias y en entornos urbanos como parques o zonas de recreo, debido a la presencia de población con mayor sensibilidad a las radiaciones como son los niños. Las mediciones se han realizado mayormente a nivel de suelo, a pesar de que también se han realizado mediciones en las zonas más cercanas a las antenas donde las emisiones son de mayor magnitud, y más si no se encuentran obstáculos situados entre la antena y el punto medido”. Raul de la Rosa ha recordado que se considera que la tasa de personas electrohipersensibles en los países industrializados se acerca al cinco por ciento de la población.
Axier Jaka ha señalado que a pesar de que los datos revelados en este estudio dan una fotografía muy significativa, y lo importante ahora es seguir trabajando para que en la mayor brevedad posible se redacte una nueva ordenanza: “Este Ayuntamiento quiere dar pasos firmes para controlar que los campos electromagnéticos de alta frecuencia que se generan en el municipio no supongan una afección en la salud de las personas, y, entre otras cosas, también vamos a proceder a regularizar las antenas que hoy en día carecen de licencia municipal”.
El estudio, en ese sentido, se ha elaborado tomando como punto de partida la base de datos de las licencias que conceden el Ayuntamiento y el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Así se ha detectado que hay antenas que carecen de licencia municipal, por lo que ahora se contrastaran los datos para identificar dichas antenas y proceder a su regulación
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