Hábitos frecuentes durante las Navidades como las compras online, el intercambio de archivos (postales navideñas, vídeos, etc) o la tendencia a relajar los usos en las redes sociales comprometen seriamente la seguridad de nuestros datos y equipos
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Lunes 23 de diciembre de 2013
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“Voy a descargarme esta postal navideña y compartirla” o “Me ha llegado una oferta increíble de productos al 50% de una tienda online, voy a entrar a curiosear” ¿Cuántas veces hemos dicho y hecho cosas como ésta, sin pensar los riesgos a los que nos exponemos? La Navidad es una época que supone una gran cantidad de cambios en nuestra rutina, una época de compras de última hora, de mucha actividad en las redes sociales, de intercambio de archivos, etc. Todo un conjunto de actividades que pueden suponer un serio riesgo para la seguridad de nuestra vida digital, ya que se exponen los datos contenidos en smartphones, portátiles, tablets…
Durante las Navidades, más que nunca, es frecuente por ejemplo compartir nuestros dispositivos, lo que incrementa las posibilidades de infección o de accesos maliciosos a los datos que contienen. También es habitual que dediquemos largos ratos a navegar por la web en busca de ofertas para regalar o archivos divertidos que compartir con amigos y familiares (visitas a páginas que contienen malware, descarga involuntaria de virus…). Si a este “cóctel” le sumamos que solemos aceptar invitaciones de personas con las que hace tiempo no tenemos contacto, o que nos conectarnos a redes WiFi públicas (de estaciones, aeropuertos, etc.) para consultar nuestro correo electrónico, los riesgos para la seguridad se disparan de forma exponencial.
Durante las Navidades, más que nunca, es frecuente por ejemplo compartir nuestros dispositivos, lo que incrementa las posibilidades de infección o de accesos maliciosos a los datos que contienen. También es habitual que dediquemos largos ratos a navegar por la web en busca de ofertas para regalar o archivos divertidos que compartir con amigos y familiares (visitas a páginas que contienen malware, descarga involuntaria de virus…). Si a este “cóctel” le sumamos que solemos aceptar invitaciones de personas con las que hace tiempo no tenemos contacto, o que nos conectarnos a redes WiFi públicas (de estaciones, aeropuertos, etc.) para consultar nuestro correo electrónico, los riesgos para la seguridad se disparan de forma exponencial.
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Check Point, líder mundial en sistemas de seguridad e inventor del firewall, ofrece algunos sencillos consejos para el uso seguro de nuestros dispositivos de tecnología en Navidades:
1 | Mantener siempre actualizada la protección de nuestros equipos (no sólo portátiles, también tablets y smartphones)
2 | Evitar acceder a redes WiFi de lugares públicos (y nunca introducir contraseñas)
3 | No compartir dispositivos con terceros
4 | Estar prevenido frente a mensajes repentinos con ofertas sospechosas o que soliciten ciertos datos (podríamos ser víctimas de un ataque de phising)
5 | Controlar los hábitos de navegación de los más pequeños, ya que disponen de más tiempo libre y estarán más expuestos a los riesgos de la web.
1 | Mantener siempre actualizada la protección de nuestros equipos (no sólo portátiles, también tablets y smartphones)
2 | Evitar acceder a redes WiFi de lugares públicos (y nunca introducir contraseñas)
3 | No compartir dispositivos con terceros
4 | Estar prevenido frente a mensajes repentinos con ofertas sospechosas o que soliciten ciertos datos (podríamos ser víctimas de un ataque de phising)
5 | Controlar los hábitos de navegación de los más pequeños, ya que disponen de más tiempo libre y estarán más expuestos a los riesgos de la web.
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