vanessa rodríguez
Juan López de Uralde, entonces director ejecutivo de Geenpeace España (en el papel de Jefe de Estado de Greenpeace) junto a los activistas Nora Chistiansen (como su mujer) y Christian Schmutz (como personal de seguridad), se coló en la cena de gala que ofrecía la Reina de Dinamarca a los Jefes de Estado y de Gobierno con motivo de la Cumbre del Clima que se celebraba en Copenhague. Vestidos de etiqueta, fueron interceptados por agentes de seguridad ya en el interior del edificio y tras pasar varios controles de seguridad. Los miembros de Greenpeace mostraron al mundo su preocupación por la marcha de la conferencia climática con una pancarta en que se podía leer en inglés “los políticos hablan, los líderes actúan”. La activista Melanie Francis, por su parte, aseguró sobre esta cumbre que “mientras los líderes mundiales cenan, el destino de cientos de millones de personas y de innumerables especies está en juego”.
Según Greenpeace “finalmente, los Jefes de Estado no cumplieron con la petición de Greenpeace. La cumbre terminó en fracaso y desorganización al acordar el llamado “Acuerdo de Copenhague”, un documento vacío, sin compromisos vinculantes ni objetivos o agendas para recortar las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Este acto llevó a Juan López de Uralde y a otros 3 activistas del grupo ecologista a prisión. Todavía está pendiente de juicio.
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